Hay quien no lo recuerda, pero no hace mucho necesitábamos conectarnos a un cable para poder entrar en Internet. Los avances tecnológicos han hecho que esto ya no sea imprescindible y podamos conectarnos desde cualquier parte a través del Wi-Fi y del uso de datos móviles. Para los nómadas digitales es una situación ideal.
¿Qué es un nómada digital?
Los nómadas digitales no permanecen en un lugar para conectarse. Normalmente trabajan a través de Internet desde distintos sitios. Por eso, carecen de lugar de trabajo y utilizan redes de Wi-Fi abiertas o datos móviles para desempeñar su labor. Algunos de ellos utilizan cables Ethernet para tener una conexión más sólida en determinados lugares.
Cafeterías, aeropuertos, centros comerciales, librerías… Son los lugares en los que abundan aquellas personas que buscan una ventana al mundo a través de la conexión a Internet. Y es que no estar en línea puede resultar frustrante para quienes han elegido este tipo de vida.
La libertad para los nómadas digitales es poder viajar y trabajar al mismo tiempo. Muchos de ellos se desplazan por todo el globo para conocer lugares nuevos, pero dar con una conexión fiable para conectarse de manera segura puede suponer un gran problema. Dado lo importante que es que tus datos personales no caigan en manos de desconocidos, sobre todo si eres un nómada digital, veamos qué medidas llevar a cabo para evitar disgustos.
Cifra tus archivos
Hay quien cree que tener una contraseña en el ordenador es más que suficiente para mantener sus archivos protegidos. Al fin y al cabo, adivinar una clave podría suponer un reto a la hora de meterse en el ordenador de alguien y acceder a sus archivos, ¿verdad?
No es del todo cierto. Los hackers utilizan redes abiertas y puntos de acceso a redes de Wi-Fi público con el fin de acceder a dispositivos ajenos. Esto supone un riesgo para la privacidad de tus datos. Los hackers pueden usar métodos de fuerza bruta para adivinar una contraseña y una vez lo hagan, podrán ver todo tipo de archivos: fotografías, documentos y todo lo que se guarde en un dispositivo.
Por esta razón es recomendable valorar la opción de cifrar tus archivos, ya que significa codificarlos. Esto quiere decir que si alguien da con los archivos cifrados, no podrá saber qué contienen. Necesitará una clave que a menudo se trata de una contraseña que desbloquea el contenido.
En Internet encontrarás muchas herramientas que cifran archivos, con lo cual son muchas las opciones que puedes escoger. Las aplicaciones con las que cifrar tus archivos desde el escritorio de tu ordenador son mejores que aquellas que lo hacen automáticamente en la nube, puesto que tendrás un mayor control sobre tus archivos.
Crea contraseñas seguras
La mayoría de sitios web tienen instrucciones sobre cómo crear contraseñas seguras. Suelen ser bastante básicas, como por ejemplo, que esté compuesta de 8 caracteres, que mezcles letras mayúsculas y minúsculas, y que añadas algún símbolo. A menudo, estas medidas no son suficientes.
Necesitas hacer más a la hora de crear contraseñas seguras para acceder a tus dispositivos. Se llevan a cabo distintas técnicas, pero la mayoría de las personas optan por mezclar símbolos, números y caracteres. Lo cierto es que es un método que ayuda a que las contraseñas sean más complejas, y por tanto, más seguras, pero ¿son fáciles de recordar?
Las páginas que generan contraseñas sugieren crearlas a partir de una frase para que puedas recordar. El problema de usar generadores de claves es que, a menudo, la contraseña puede carecer de sentido para ti, por lo que se vuelven difíciles de recordar. Sin embargo, pueden servirte como una guía, es decir, a partir de la combinación de símbolos y caracteres, puedes crear tu propia contraseña:
Una buena manera de recordar tus contraseñas es a través de la creación de frases, tal y como recomiendan los generadores de contraseñas.
Cuidado con las redes Wi-Fi públicas
Es posible que, como nómada digital, confíes en la mayoría de redes públicas que encuentras a tu paso. Esto se traduce en que tienes más probabilidades de sufrir un ciberataque, dado que se produce un gran número de ataques a través de un Wi-Fi abierto. Por ello, es necesario saber cómo mantenerse a salvo en una red de Wi-Fi pública.
En primer lugar, hay que asegurarse de que la red a la que te vas a conectar es la correcta. Los hackers saben cómo configurar sus propias redes y además, hacer que parezcan de confianza. Por ejemplo, podrían crear una con el nombre “coffee shop”, de tal manera que podrías pensar que la cafetería en la que te encuentras tiene Wi-Fi gratis.
Una vez te conectes a la red de los hackers, estos tendrán acceso a todos los datos que se encuentran en tu dispositivo. Sin embargo, esta situación se puede evitar fácilmente. Basta con preguntar al personal del establecimiento si disponen de Wi-Fi y el nombre de la red. Así, si hay más de una red pública a la cual conectarte, podrás descartar todas las que no sean de confianza.
Además, antes de conectarte, deberás desactivar la opción de compartir tus archivos automáticamente en las redes a las que te conectas. De lo contrario, los hackers podrán ver y acceder a todo tu contenido. Por ello, lo mejor es que te asegures de que tienes desactivada esta opción cuando no vayas a conectarte a una red privada de confianza.
Red privada virtual
Para que tus datos estén más protegidos es recomendable el uso de redes privadas virtuales, también conocidas como VPN. Estas redes proporcionan accesos seguros a Internet y funcionan como si te conectaras a una red privada, pero desde cualquier parte del mundo.
Es fácil configurar tu propia red de seguridad. Sin embargo, muchas personas desisten de ello porque parece complicado y en ocasiones puede costar dinero. Lo cierto es que pagar por un VPN es una fantástica manera de que tus datos estén protegidos a la hora de conectarte.
La principal función de los VPN, y el motivo por el cual son tan populares, es que ayudan a proteger tus datos. Además, lo mejor de todo es que se pueden utilizar tanto para redes públicas como privadas, y muchas de ellas bloquean la posibilidad de que algunas páginas web registren tu actividad. Por ejemplo, no volverás a ver un mensaje como el que se muestra en la siguiente imagen, ya que con un VPN nadie podrá saber lo que haces en Internet.
Es posible que alguna vez hayas visto un aviso como este que advierte que cualquiera puede saber las páginas web que visitas. Es por esto por lo que los VPN son importantes para preservar tu seguridad.
Hazte con un buen antivirus
Los antivirus son fundamentales a la hora de protegerse en línea. Hay mucho donde elegir y algunos de ellos tienen versiones totalmente gratuitas para los presupuestos más ajustados. Es posible que el antivirus Avast sea uno de los más populares, el cual puede detectar virus y malware, así como enviar notificaciones cada vez que encuentre algún archivo infectado o alguien esté tratando de acceder a tu sistema.
Sin embargo, lo mejor es pagar por un antivirus. A través de un servicio de pago obtendrás varias funcionalidades para aumentar la protección de tu equipo. Tratar de encontrar aquel que te ofrece más protección al menor precio puede ser complicado, al igual que elegir entre los mejores antivirus.
¿La mejor opción? Las pruebas gratuitas. Son una buena manera de saber qué antivirus es el que necesitas. Al probar los que te parecen más interesantes, sabrás también cuáles son los que tienen mejor usabilidad. Además, si no eres muy dado a las tecnologías, esta opción también te servirá a la hora de saber qué software es el más adecuado para ti.
Encontrarás muchas páginas web con comparativas sobre los mejores antivirus. Aquí se puede consultar una lista de los 10 mejores elaborada por PC Advisor, con las características que ofrece cada una junto a su correspondiente precio. Es buena idea tomarse un tiempo cuando la seguridad de tus datos están en juego.
Mantén tus pertenencias a salvo
Cuando hablamos de las medidas de seguridad que un nómada digital debería tomar, solemos pensar en cómo proteger sus dispositivos cuando se conecta fuera de casa. La idea es evitar los ataques y que los datos sigan protegidos, pero solemos olvidar la importancia de no desatender los dispositivos.
Es altamente recomendable tener un ojo puesto en nuestros dispositivos. Por ejemplo, si has llegado a una cafetería para conectarte, y además para cargar tu dispositivo, entonces lo mejor es que no lo abandones cuando necesites ir al baño o pedir otro café. A pesar de que creas que no es para tanto dado que tu dispositivo está a la vista y podrás verlo desde lejos, o que no te vas a ausentar mucho, lo cierto es que esos momentos son suficientes para que alguien haga algo con él o se lo lleve.
No te preocupes si sucede lo peor y roban tu dispositivo. Podrás seguirle la pista a través de una aplicación que rastrea tu teléfono móvil o tu portátil. También está la opción de hacerlo sin tener que descargar e instalar nada nuevo. Algunas aplicaciones populares como Gmail o Facebook podrían ayudarte en esta tarea, y en el momento en el que sepas dónde se encuentran tus pertenencias, podrás ponerte en contacto con las autoridades.
Ciberseguridad para nómadas digitales
La libertad define a los nómadas digitales, sobre todo, a la hora de conectarse para trabajar. Pero moverse permanentemente también significa ser vulnerable a los ataques de los hackers, como ocurre con la mayoría de personas. Este es el principal motivo por el cual llevar a cabo las medidas de seguridad mencionadas sea tan importante.
Está en tu mano poner en práctica algunas de ellas o todas. Por suerte, estos consejos te ayudarán a proteger tus datos y mantener a salvo tu información privada.[:]
